Enfermedades de la mujer: Miomas
   

Enfermedades de la mujer: Miomas

Vitaly Valua/123RF

¿Qué son miomas?

Los miomas son tumores benignos (no cancerosos) más comunesdel tracto genital femenino. También son conocidos como fibromas, fibromiomas o leiomiomas.

Se desarrollan en la pared muscular del útero. Aunque no siempre producen síntomas, su tamaño y localización pueden causar problemas en algunas mujeres, como por ejemplo sangrado ginecológico y dolor en el bajo vientre.

Aunque las causas exactas de la aparición de los miomas no estén todavía bien establecidas, los investigadores creen que se deban tanto a una predisposición genética como a una mayor sensibilidad a la estimulación hormonal (principalmente estrógeno). Algunas mujeres que pueden tener esta predisposición, desarrollan factores que permiten que estos crezcan bajo la influencia de las hormonas femeninas. Esto explicaría por que razón ciertos grupos étnicos y familiares son más propensos a tener miomas.

Los miomas varían mucho en tamaño. En algunos casos pueden provocar un crecimiento acentuado del útero, simulando una gravidez de hasta 5 o 6 meses. En la mayoría de los casos los miomas son múltiples.

Los miomas pueden localizarse en diversas partes del útero. Existen, básicamente, cuatro tipos de mioma:


Miomas

1 - Subserosos: Aparecen y se desarrollan bajo la capa (serosa) externa del útero y se extienden a través de ésta, dando al útero una apariencia nodular. Típicamente no afectan el flujo menstrual, pero pueden causar dolores en el bajo vientre, en la región lumbar y sensación de presión en el abdomen. Suelen desarrollar un cabillo o pedículo, haciéndolos difíciles de distinguir de un tumor ovárico en la ultrasonografía.

2 - Intramurales: Se desarrollan en la pared del útero y se extienden hacia adentro, aumentando el tamaño del útero. Son el tipo más común de mioma. Pueden causar sangrado menstrual intenso y dolores en el bajo vientre y en la región lumbar y/o sensación de presión generalizada en el bajo vientre, de que se quejan muchas mujeres.

3 - Submucosos: Se encuentran justo bajo el revestimiento interno del útero (endometrio). A pesar de que son el tipo menos común de mioma, son los que más problemas suele causar. Incluso un pequeño mioma submucoso puede causar sangrado ginecológico masivo.

4- Pediculados: Son los miomas que inicialmente crecen como subserosos y se destacan parcialmente del útero, quedando ligados a éste apenas por una pequeña porción de tejido llamada pedículo. Se los puede confundir en la ultrasonografía con tumores ováricos. 

¿CUALES SON LOS SINTOMAS MAS COMUNES ?

La mayoría de los miomas no presentan síntomas - apenas del 10 al 20% de las mujeres que tienen miomas necesitarán tratamiento.

Dependiendo de su localización, tamaño y cantidad, la mujer puede presentar los siguientes síntomas:

  • Períodos menstruales prolongados y con aumento de flujo, sangrado fuera de época, algunas veces coágulos, y anemia. Estos son los síntomas más frecuentemente asociados a los miomas. Además, se pueden verificar:

    • Aumento de intensidad de los cólicos menstruales.
    • Dolor en el bajo vientre, o más precisamente, sensación de presión o incomodidad causada por el tamaño y peso de los miomas que presionan las estructuras adyacentes.
    • Dolor en la región lumbar, parte lateral del abdomen o piernas (los miomas pueden presionar los nervios que atraviesan el bajo vientre y las piernas).
    • Dolor durante el acto sexual (Dispareunia)
    • Presión en el sistema urinario, lo que siempre provoca un aumento de la frecuencia de la orina, principalmente en la noche.
    • Presión en el intestino grueso, llevando al estreñimiento y a la retención de gases.
    • Aumento de volumen abdominal que puede ser mal interpretado como subida progresiva de peso.
Si Usted tiene algunos de estos síntomas, visite a su médico.

 

¿QUIEN ES MAS PROPENSO A TENER MIOMAS?

Los miomas son tumores muy comunes. El número de mujeres que tiene miomas aumenta con la edad hasta la menopausia, cuando entonces éstos disminuyen por falta de estímulo hormonal. Aproximadamente un 20% de las mujeres presentan miomas entre los 20 y 30 años, un 30% entre los 30 y 40, y un 40% entre los 40 y 50 años. De 20 a 40% de las mujeres con 35 años o más, tienen miomas de tamaño considerable.

Las mujeres de color presentan mayor riesgo de desarrollar miomas: un 50% pueden tener miomas de tamaño significativo. No se sabe a ciencia cierta el porqué, aunque sí parezca existir un factor genético desempeñando un papel importante.

Si bien los miomas puedan aparecer en la mujer a los 20 años, la mayoría de las mujeres no presentan síntomas hasta los 30-40 años. Los médicos no son capaces de prever si un mioma va a crecer o provocar síntomas.

Los miomas casi siempre mejoran después de la menopausia, cuando los niveles hormonales bajan bastante, aunque esto no siempre sea cierto.


¿COMO SE DIAGNOSTICAN LOS MIOMAS?

En general los miomas primero se detectan durante el examen ginecológico, cuando el médico percibe el aumento de tamaño del útero.

Su presencia se confirma entonces por una ultrasonido o ecografía abdominal. Este es un examen que no causa dolor, en el cual el médico desliza un instrumento (transductor) parecido al "mouse" de las computadoras sobre la superficie abdominal. Las ondas de sonido son transmitidas a través de la piel y permiten al médico "ver" el tamaño, forma y textura del útero. Una imagen es exhibida en la pantalla de la computadora a medida que el médico realiza el examen.

Los miomas también se pueden apreciar a través de resonancia magnética (RM) o tomografía computarizada (TC), exámenes que tampoco producen dolor y que permiten un diagnóstico preciso.

Finalmente, una ecografía Transvaginal y diagnóstica una excelente opción, principalmente para evaluar la presencia de miomas submucosos. Un tubo muy fino (3 mm de diámetro), ligado a una micro cámara de televisión, es introducido a través de la vagina y del cuello uterino hasta el útero, permitiendo al médico visualizar su interior y tomar muestras del tejido para análisis.

Tratamiento:

Dependerá del tipo de mioma, tamaño, localización y deseos de fertilidad futura de la paciente.
  • Si una mujer presenta miomas, pero no síntomas, muy probablemente que su médico decida una conducta expectante, controlando el útero y los fibromas en cada examen ginecológico.
  • Si los síntomas aparecen, las opciones terapéuticas son:
Tratamiento médico: con medicamentos, que incluyen anti-inflamatorios no esteroideo, píldoras anticonceptivas y tratamiento hormonal.

Tratamiento quirúrgico:

  • Miomectomía: Es un procedimiento en el cual sólo se extrae los miomas, dejando intacto el resto del útero, ofreciendo una alternativa para las mujeres que quieren preservar su fertilidad.

  • Histerectomía: Intervención quirúrgica que consiste en la extirpación total o parcial del útero o matriz. Esta puede acompañarse o no de la extirpación de los ovarios dependiendo del motivo que la justifique.

    Ambas intervenciones se realizan tradicionalmente por cirugía abdominal o vaginal, pero en la actualidad la laparoscopia está reemplazando a la cirugía convencional, dadas sus ventajas en la recuperación postoperatoria, mínima invasión, rápida recuperación y mínimas incisiones (menos cicatrices). En la cirugía laparoscópica, mediante pequeñas incisiones se introducen trócares o cilindros de entre 0,5 a 10 milímetros con instrumental especial en su punta, que permiten la visualización y la extirpación de los miomas.