Las monedas chinas en los rituales son ya legendarias pues canalizan las energías positivas fortaleciendo el aura de quien practica con ellas este legendario rito.
Existieron antes que el dinero propiamente dicho, como un vaticinio del logro material y del alcance de la felicidad a través de el. Son las monedas chinas, elementos esenciales del Feng Shui que, a través de rituales que canalizan su poder, nos permiten recibir las energías positivas y con ello, alcanzar el éxito en el plano económico.
Yo no las conocía, recientemente las vi en una revista y me interesé en ellas, no solo porque, como todo el mundo, me interesa asegurar mi futuro económico, sino porque al observarlas detenidamente me di cuenta de que tienen una estructura especial.
Centro de energía
Y no me equivoqué, la forma y estructura de la moneda tiene su explicación: los contornos son redondos, como los de cualquier moneda corriente, pero significa las enerfgías que se canalizan desde el cielo. En el centro, tiene un orificio de forma cuadrada, representa las energías que se canalizan desde la tierra.
Luego también hacia un lado tiene cuatro caracteres chinos, esto es el Yang, y en el reverso tiene dos, esto es, el Ying. En todo ritual el Yang debe de estar cara arriba.
La monedas chinas no solo te proporcionarán riqueza, sino protección contra las malas vibras, la envidia y los chismes, que muchas veces se convierten en energías negativas que arruinan nuestros proyectos, negocios o todo lo que emprendamos para mejorar nuestra vida económica. Llevar una moneda china contigo hará que esta funcione como una especie de amuleto que absorberá todas estas energías negativas desviándolas de ti.
Todo lo que concierne al bienestar material y espiritual es parte de lo que nos proporciona estas monedas. Ya sea para los negocios, para una inversión monetaria, para conservar los ahorros o si invertimos en la bolsa, un aumento de salario o si simplemente queremos no pasar penurias económicas; las monedas chinas serán el catalizador de las energías positivas y la prosperidad.
Fuente: Perú.com