Lo primero que hay que hacer antes de elegir una máscara para pestañas es establecer las prioridades: longitud, volumen, curva, etc. Así podrás elegir la máscara que se adapte mejor a tus pestañas.
Si tu pestañas son finas, lo mejor es usar una máscara que alargue, pero a la vez que den volumen y rellenen las pestañas generosamente. Esto es para evitar que al ser mas largas no parezcan aún mas finas.
Si son pestañas cortas, elige una máscara que alargue, ya que define y separa las pestañas provocando que parezcan mas largas. Nunca uses una máscara con volumen, porque al ser mas anchas, parecerán mas cortas aún.
Si consideras que tus pestañas no son ni finas ni cortas, usa una máscara que curva. Así evitarás usar el rizador de pestañas.
Si practicas deportes o tus ojos lagrimean con frecuencia, nada mejor que el waterproof (a prueba de agua) ya que no se alterará con el agua ni las lágrimas. El único cuidado que tienes que tener es no usarla todos los días, ya que acabarás rompiendo las puntas de las pestañas.
¿Qué colores usar?
Como sabemos las máscaras las podemos encontrar de varios colores, elige la que mejor le quede a tus ojos:
Negras: Le quedan bien a todo tipo de ojos y las puedes usar de día y de noche.
Marrón: son ideales para el día, dan volumen pero sin endurecer la mirada.
Violeta: resaltan los ojos oscuros o verdes.
Azul: le quedan muy bien a las personas con ojos de color almendra.
Transparentes: son perfectas para dar volumen y formar las pestañas, ideales para el día, ya que logran un look muy natural.
Si quieres lograr una máscara con efecto multicolor, primero aplica una capa de máscara negra y cuando se haya secado, aplicarás la máscara de color solo en las puntas.